Reflexiones

El año acaba, el año acabó y ya empezó el nuevo año y yo siento que acabé también, no sé si seguir o no con el blog, he querido, no saben, tengo cosas que contar, las últimas historias con el Perverso, lo gracioso que nos ha pasado y las broncas y demás, pero, no sé, no sé...

Quizás debería usar otro blog y contar mis cosas, esas que van más allá de la cama, pero tampoco creo que deba exponerme tanto, ya expuse un lado, para qué más.

Esta señorita se pone a pensar y pensar.

Nunca había confiado tanto en alguien y cuando lo hice, en lugar de apoyarme, me jodieron, eso duele y genera tanta desconfianza que, ya hasta vergüenza da contar lo que hago aquí, claro, para uds. anónima pero para él, ya no.

No es otro blog cursi, no; tampoco es un blog putón, no; entonces, solo contaré mis aventurillas, ¿total? ¿O si es un blog putón? Jajajaja.

Y tengo que contar lo de antes, lo de siempre, mi Perverso y yo que hemos vuelto a la escena de una manera nueva, más cagada, más enferma, vaya, más perversa. Pero eso sí, ya no estoy confundida, ya no, ya se que no siento por él y eso me ayuda, porque puedo tirar, ya no como antes, con un poco del corazón y otras huevadas comprometidas con él, no.

Arriolas y Desubicados del mundo, AleSam ha vuelto, y -para que suene bien pacharaco y barato- reloaded.

Por cierto, ¿podrían NO agregarme al MSN? Por las puras pues, al final, me toma más tiempo eliminarlos a todos.